El ser humano ya cosía sus prendas de abrigo en el Paleolítico superior

Tabla de perforación de cuero encontrada en la localidad barcelonesa de Gavà (arriba) y reproducción de la técnica utilizada hace 39.600 años para producir una línea de puntos (abajo) / Francesco d'Errico y Luc Doyon

16/4/2023
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Una investigación internacional demuestra que los cazadores-recolectores de hace 39.600 años confeccionaban su ropa mediante técnicas de perforación con puntón catorce milenios antes de la introducción de las agujas con ojo en Europa.

Un estudio de arqueólogos franceses, en el que han participado científicos de la Universidad de Barcelona indica que durante la cultura auriñaciense, y cuando aún no había agujas para enhebrar, el ser humano confeccionaba su ropa con la ayuda de distintos elementos, como la tabla de hueso hallada en el entorno de la localidad de Gavà, en el área metropolitana de Barcelona, en el sitio de Terrasses de la Riera dels Canyars

La confección de prendas ceñidas al cuerpo seguramente resultó fundamental para la supervivencia de las poblaciones paleolíticas, que vivieron en una era de temperaturas gélidas hace unos 40.000 años. Ahora gracias a esta investigación de un grupo de investigadores de las universidades de Burdeos y Barcelona, se ha abierto el camino a entender qué herramientas y técnicas utilizaban estas poblaciones primitivas como seres humanos anatómicamente modernos que convivieron con los neandertales.

La tabla de perforación encontrada en Gavà es un fragmento de pelvis de un gran mamífero, probablemente un caballo o un bisonte, que incorpora 28 perforaciones en su parte plana y tiene una antigüedad calculada de unos 39.600 años, y que ha permitido entender a los investigadores como se consían trajes más ajustados en cueros gruesos en aquella época prehistórica.

Hasta ahora, los especialistas habían asumido que la época de la invención de las agujas con ojo para enhebrar podría haber coincidido con la aparición de la indumentaria entallada, si bien esta herramienta, en apariencia, no parecía lo suficientemente resistente como para perforar repetidamente el cuero.

Sin embargo, a partir de esta investigación, los científicos han podido constatar que era posible realizar señales idénticas perforando un cuero grueso para hacer una línea de puntos necesaria para la fabricación de objetos impermeables en cuero, una técnica que coincide con la empleada por los zapateros en las sociedades tradicionales.